Preparé pizza en sartén solo con verduras

Introducción

Esta pizza en sartén con verduras es una opción saludable, deliciosa y baja en calorías, perfecta para quienes buscan cuidar su alimentación sin renunciar al sabor. Con solo 100 kcal por porción, esta receta es ideal para una cena ligera o un almuerzo rápido. Además, es una excelente manera de incorporar una gran variedad de verduras a tu dieta de una forma creativa y sabrosa.

La base de esta pizza se prepara sin harina, utilizando una mezcla de brócoli, huevos y especias, lo que la convierte en una opción sin gluten y baja en carbohidratos. El calabacín, la zanahoria, el pimiento y la cebolla aportan una gran cantidad de nutrientes, fibra y antioxidantes, además de darle a la pizza una textura interesante y un sabor delicioso.

Preparar esta pizza en sartén es muy fácil y rápido. No necesitas ser un experto en la cocina para obtener un resultado espectacular. Con unos pocos pasos sencillos, puedes tener lista una comida saludable y satisfactoria en cuestión de minutos. Es perfecta para esos días en los que no tienes mucho tiempo para cocinar pero no quieres renunciar a comer bien.

Esta receta es muy versátil y se puede adaptar a tus gustos y preferencias. Puedes experimentar con diferentes combinaciones de verduras, especias y quesos para crear tu propia versión única de esta pizza saludable. Es una excelente manera de ser creativo en la cocina y de disfrutar de una comida deliciosa y nutritiva al mismo tiempo.

Por qué te encantará esta receta

Una de las principales razones por las que te encantará esta receta es su bajo contenido calórico. Con solo 100 kcal por porción, puedes disfrutar de una pizza deliciosa sin sentirte culpable. Es perfecta para quienes están cuidando su peso o simplemente buscan opciones más ligeras y saludables.

Otra razón para amar esta pizza es su alto contenido de verduras. Está repleta de vegetales nutritivos y llenos de fibra, lo que la convierte en una opción ideal para aumentar tu ingesta diaria de verduras. Además, la variedad de colores y texturas de las verduras hace que esta pizza sea visualmente atractiva y apetitosa.

La facilidad de preparación es otro de sus puntos fuertes. No necesitas horno ni utensilios complicados. Con una simple sartén y unos pocos ingredientes, puedes tener lista una comida completa y deliciosa en poco tiempo. Es perfecta para cocineros principiantes o para esos días en los que no tienes ganas de pasar horas en la cocina.

Finalmente, esta receta es muy versátil y adaptable. Puedes personalizarla a tu gusto añadiendo tus verduras favoritas, diferentes tipos de queso o incluso un poco de proteína magra como pollo o pavo. Las posibilidades son infinitas, lo que te permite ser creativo y crear una pizza que se adapte perfectamente a tus preferencias.

Ingredientes que necesitarás

Para preparar esta deliciosa y saludable pizza en sartén con verduras, necesitarás ingredientes frescos y nutritivos. El ingrediente principal para la base es 1 brócoli, que se procesará hasta obtener una textura similar a la de la masa de pizza. También necesitarás 1 calabacín pelado y cortado en rodajas, 1 zanahoria pelada y cortada en trozos, 1 pimiento cortado en cubos y 1 cebolla picada. Estas verduras aportarán sabor, textura y nutrientes a la pizza.

Para unir los ingredientes de la base y añadir proteínas, necesitarás 2 huevos. También puedes añadir un poco de queso rallado bajo en grasa si lo deseas, para darle un toque extra de sabor y ayudar a que la base se mantenga unida.

Para sazonar, necesitarás sal, pimienta y tus hierbas o especias favoritas. Orégano, albahaca, ajo en polvo o una pizca de hojuelas de chile rojo son excelentes opciones para darle más sabor a la pizza.

Opcionalmente, puedes añadir un poco de salsa de tomate sin azúcar como base para la pizza y cubrirla con más queso rallado bajo en grasa y tus verduras favoritas cortadas en trozos pequeños.

Estos ingredientes se combinan para crear una pizza deliciosa, saludable y llena de color. La mayoría de estos ingredientes son fáciles de encontrar en cualquier supermercado o, probablemente, ya los tengas en tu cocina.

Cómo hacer “Pizza en Sartén con Verduras”

El proceso para hacer esta pizza en sartén comienza con la preparación de la base de brócoli. Se debe cocinar el brócoli al vapor o hervirlo hasta que esté tierno, luego procesarlo en un procesador de alimentos hasta obtener una textura fina, similar a la del arroz. El exceso de agua se debe exprimir para evitar que la base quede demasiado húmeda.

En un tazón, se mezcla el brócoli procesado con los huevos batidos, el queso rallado (si se usa) y los condimentos. Esta mezcla se extiende en una sartén antiadherente previamente calentada y se cocina a fuego medio hasta que la base esté firme y ligeramente dorada.

Mientras se cocina la base, se saltean las verduras (calabacín, zanahoria, pimiento y cebolla) en otra sartén hasta que estén tiernas pero aún crujientes. Si se desea, se puede extender una fina capa de salsa de tomate sobre la base de brócoli.

Finalmente, se cubren con las verduras salteadas y el queso rallado (si se usa). La pizza se cocina a fuego lento hasta que el queso se derrita y las verduras estén bien calientes. Se puede tapar la sartén para ayudar a que el queso se derrita más rápido.

Este método simple y rápido produce una pizza deliciosa y saludable, perfecta para una comida ligera o una cena rápida entre semana. La combinación de la base de brócoli con las coloridas verduras crea un plato visualmente atractivo y lleno de sabor.

Instrucciones paso a paso

1. Preparar el brócoli: Lava el brócoli y córtalo en ramilletes pequeños. Cocina el brócoli al vapor o hiérvelo en agua con sal durante 5-7 minutos, o hasta que esté tierno pero aún firme.
2. Escurre bien el brócoli y colócalo en un procesador de alimentos. Procesa hasta obtener una textura fina, similar a la del arroz.
3. Coloca el brócoli procesado en un paño de cocina limpio o una gasa y exprime para eliminar el exceso de agua. Es importante que el brócoli quede lo más seco posible para que la base de la pizza no quede húmeda.
4. Preparar las verduras: Mientras se cocina el brócoli, pela el calabacín y córtalo en rodajas finas. Pela la zanahoria y córtala en trozos pequeños. Corta el pimiento en cubos y pica la cebolla finamente.
5. Preparar la base: En un tazón grande, mezcla el brócoli procesado y exprimido con los 2 huevos batidos. Si decides usar queso rallado, añade aproximadamente 1/2 taza a la mezcla. Sazona con sal, pimienta y tus hierbas o especias favoritas. Mezcla bien hasta obtener una masa homogénea.
6. Calienta una sartén antiadherente grande a fuego medio. Si es necesario, añade un poco de aceite de oliva en aerosol.
7. Extiende la mezcla de brócoli en la sartén caliente, formando un círculo como si fuera una base de pizza. Presiona ligeramente con una espátula para compactar la base.
8. Cocina la base durante 8-10 minutos, o hasta que esté firme y ligeramente dorada por la parte inferior.
9. Saltear las verduras: Mientras se cocina la base, calienta otra sartén con un poco de aceite de oliva (si es necesario). Añade la cebolla picada y saltea durante 2-3 minutos hasta que esté transparente.
10. Incorpora el calabacín, la zanahoria y el pimiento a la sartén. Cocina a fuego medio durante 5-7 minutos, o hasta que las verduras estén tiernas pero aún crujientes. Sazona con sal y pimienta al gusto.
11. Montar la pizza: Si decides usar salsa de tomate, extiende una fina capa sobre la base de brócoli cocida.
12. Distribuye las verduras salteadas uniformemente sobre la base de la pizza. Si usas queso rallado, espolvorea la cantidad deseada (aproximadamente 1/2 taza) sobre las verduras.
13. Cocinar la pizza: Reduce el fuego a bajo y cocina la pizza durante 5-7 minutos más, o hasta que el queso se haya derretido y las verduras estén bien calientes. Puedes tapar la sartén para ayudar a que el queso se derrita más rápido y las verduras se cocinen de manera uniforme.
14. Servir: Una vez que la pizza esté lista, retírala del fuego y déjala reposar durante unos minutos antes de cortarla en porciones. Sirve caliente y disfruta de ¹ tu deliciosa y saludable pizza en sartén con verduras.  
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Consejos útiles

Para que la base de brócoli quede más crujiente, puedes prehornearla en un horno convencional a 200°C (400°F) durante 10-15 minutos antes de añadir los toppings. Esto ayudará a eliminar aún más humedad y a que la base quede más firme.

Si no tienes un procesador de alimentos, puedes rallar finamente el brócoli cocido con un rallador manual. Asegúrate de escurrir bien el exceso de agua después de rallarlo.

Puedes personalizar esta pizza con tus ingredientes favoritos. Añade otras verduras como champiñones, espinacas, tomates cherry o aceitunas. También puedes incorporar proteínas magras como pollo, pavo o jamón cocido en trocitos.

Para un toque extra de sabor, añade un poco de ajo picado o en polvo a la mezcla de la base de brócoli. También puedes espolvorear un poco de queso parmesano rallado sobre la base antes de añadir los toppings.

Si quieres una pizza más picante, añade una pizca de hojuelas de chile rojo a la base o a las verduras salteadas. También puedes usar un poco de salsa picante como topping una vez que la pizza esté lista.

Detalles

Tiempo de preparación: 20 minutos. Esto incluye el tiempo para cocinar el brócoli, preparar las verduras y hacer la base.

Tiempo de cocción: 20-25 minutos. Esto incluye el tiempo para cocinar la base y las verduras, y para que el queso se derrita.

Tiempo total: 40-45 minutos. Es una receta relativamente rápida y fácil, perfecta para una comida o cena entre semana.

Rendimiento: Esta receta rinde aproximadamente 4 porciones, dependiendo del tamaño de las porciones.

Categoría: Plato principal, Almuerzo, Cena.

Método: Cocción en sartén.

Cocina: Internacional, Saludable.

Dieta: Esta receta es vegetariana, sin gluten y baja en carbohidratos. Se puede adaptar fácilmente a una dieta vegana utilizando un sustituto de huevo y queso vegano rallado.

Notas

Esta pizza es una excelente opción para personas que siguen una dieta baja en carbohidratos o sin gluten. Sin embargo, es importante recordar que, aunque es una alternativa más saludable a la pizza tradicional, debe consumirse con moderación como parte de una dieta equilibrada.

Si bien la receta especifica 100 kcal por porción, el contenido calórico exacto puede variar dependiendo de los ingredientes específicos que utilices y del tamaño de las porciones. Si estás contando calorías, te recomiendo que calcules el contenido calórico exacto utilizando la información nutricional de los ingredientes que uses.

Esta pizza se disfruta mejor recién hecha, cuando la base está crujiente y las verduras están en su punto. Sin embargo, puedes guardar las sobras en el refrigerador hasta por 2 días y recalentarlas en una sartén o en el horno a baja temperatura.

Si eres alérgico a alguno de los ingredientes de esta receta, puedes sustituirlos por otros que se adapten a tus necesidades. Por ejemplo, puedes usar coliflor en lugar de brócoli para la base, o calabaza en lugar de zanahoria.

Recuerda que esta receta es solo una guía y puedes adaptarla a tus gustos y preferencias. No dudes en experimentar con diferentes ingredientes y sabores para crear tu propia versión perfecta de esta pizza saludable.

Preguntas frecuentes

¿Puedo usar brócoli congelado en lugar de fresco? Sí, puedes usar brócoli congelado. Descongélalo completamente y escúrrelo bien antes de procesarlo. Es posible que necesites exprimir más agua del brócoli congelado, ya que tiende a contener más humedad que el fresco.

¿Qué hago si no tengo procesador de alimentos? Puedes rallar finamente el brócoli cocido con un rallador manual o picarlo muy finamente con un cuchillo. La textura será un poco diferente, pero el resultado seguirá siendo delicioso.

¿Puedo usar otro tipo de queso? Sí, puedes usar cualquier tipo de queso que te guste o que tengas a mano. Mozzarella, cheddar, provolone o una mezcla de quesos italianos son buenas opciones. También puedes usar queso vegano rallado para una versión sin lácteos.

¿Cómo puedo hacer que la base quede más crujiente? Para una base más crujiente, prehornéala en un horno convencional a 200°C (400°F) durante 10-15 minutos antes de añadir los toppings. También puedes cocinarla en una sartén de hierro fundido para obtener un fondo más dorado y crujiente.

¿Puedo preparar la base de la pizza con antelación? Sí, puedes preparar la base con antelación y guardarla en el refrigerador hasta por 2 días. También puedes congelarla, bien envuelta en film transparente, hasta por 1 mes. Descongélala completamente antes de añadir los toppings y cocinarla.

¿Esta pizza es apta para niños? Sí, esta pizza es una excelente manera de que los niños coman más verduras. Puedes involucrarlos en el proceso de preparación, como mezclar los ingredientes de la base o distribuir las verduras sobre la pizza.

¿Puedo añadir salsa de tomate a esta pizza? Sí, puedes añadir una fina capa de salsa de tomate sin azúcar sobre la base de brócoli antes de añadir las verduras y el queso. Esto le dará un sabor más tradicional a la pizza.

Instrucciones de almacenamiento

Si te sobra pizza, es importante almacenarla correctamente para mantener su frescura y sabor. Deja que la pizza se enfríe completamente a temperatura ambiente antes de guardarla. Esto evitará que se forme condensación dentro del recipiente de almacenamiento, lo que podría humedecer la base y afectar su textura.

Una vez fría, corta la pizza en porciones individuales y colócalas en un recipiente hermético o envuélvelas bien en film transparente. Si vas a apilar las porciones, coloca un trozo de papel encerado o pergamino entre cada una para evitar que se peguen.

La pizza se conservará bien en el refrigerador hasta por 2 días. Cuando estés listo para disfrutarla de nuevo, puedes recalentarla en una sartén a fuego medio-bajo hasta que esté bien caliente y el queso se haya derretido de nuevo. También puedes recalentarla en un horno precalentado a 180°C (350°F) durante 5-10 minutos, o hasta que esté caliente.

Evita recalentar la pizza en el microondas, ya que la base puede volverse gomosa y perder su textura crujiente. Si tienes prisa, es mejor recalentarla en una sartén tapada a fuego muy bajo para que se caliente uniformemente sin quemarse.

No se recomienda congelar esta pizza, ya que la base de brócoli y las verduras pueden perder su textura y soltar mucha agua al descongelarse. Es mejor prepararla fresca y disfrutarla en el momento o refrigerarla por un corto período de tiempo.

Recetas relacionadas

Si te ha gustado esta pizza en sartén con verduras, seguramente disfrutarás de otras recetas similares que son saludables, deliciosas y fáciles de preparar. Una excelente opción es la “pizza” de coliflor, que utiliza una base hecha de coliflor rallada y cocida, similar a la base de brócoli de esta receta. Puedes cubrirla con tus ingredientes favoritos, como salsa de tomate, queso y verduras.

Otra alternativa son los barquitos de calabacín rellenos, que se preparan cortando los calabacines por la mitad a lo largo, retirando parte de la pulpa y rellenándolos con una mezcla de verduras, carne molida o queso. Se hornean hasta que estén tiernos y dorados, y son una comida completa y nutritiva.

Si buscas algo más ligero, las tortillas de verduras al horno son una excelente opción. Se preparan con una mezcla de huevos batidos y verduras picadas finamente, como espinacas, champiñones, pimientos y cebolla. Se hornean en moldes para muffins o en una bandeja para hornear y son perfectas para un desayuno o brunch saludable.

Para los amantes de los sabores italianos, las berenjenas a la parmesana son un plato delicioso y reconfortante. Se preparan con rodajas de berenjena empanizadas y