POLLO ESTILO KFC

Introducción

El pollo frito estilo KFC es conocido mundialmente por su crujiente empanizado y su jugosa carne. Esta receta busca recrear esa experiencia en casa, utilizando ingredientes sencillos y un proceso detallado que te permitirá obtener un resultado comparable al del famoso restaurante de comida rápida.

Aunque la receta original de KFC es un secreto bien guardado, esta versión se aproxima bastante al sabor y la textura que tanto gustan a los fanáticos del pollo frito. Es una opción perfecta para una comida o cena especial, o simplemente para darte un capricho y disfrutar de un pollo frito casero delicioso.

Preparar pollo frito estilo KFC en casa te permite controlar la calidad de los ingredientes y personalizar el sabor a tu gusto. Además, es una actividad divertida para compartir en familia o con amigos.

Descripción general de la receta

Esta receta de pollo estilo KFC se divide en tres partes principales: marinado, empanizado y fritura. Primero, los muslos de pollo se marinan en una mezcla de leche y especias para que se impregnen de sabor y queden más tiernos. Luego, se pasan por una mezcla de huevo y leche, seguida de una combinación de harina, maicena y especias, y finalmente por pan rallado para obtener un empanizado crujiente y dorado.

El secreto para un buen pollo frito radica en el marinado y en la mezcla de especias del empanizado. La combinación de ajo, orégano, pimentón y cebolla en polvo, junto con la sal y la pimienta, crea un perfil de sabor similar al del pollo KFC original.

Finalmente, los muslos de pollo se fríen en abundante aceite caliente hasta que estén bien cocidos y dorados. El resultado es un pollo jugoso por dentro y crujiente por fuera, con un sabor irresistible.

Historia y origen

KFC, originalmente Kentucky Fried Chicken, es una cadena de restaurantes de comida rápida fundada por el Coronel Harland Sanders en 1930 en Kentucky, Estados Unidos. El Coronel Sanders desarrolló una receta secreta de pollo frito con una mezcla de 11 hierbas y especias que se convirtió en la base del éxito de la cadena.

A lo largo de los años, KFC se ha expandido a nivel mundial, convirtiéndose en una de las cadenas de comida rápida más reconocidas del mundo. El pollo frito estilo KFC es famoso por su empanizado crujiente y su sabor característico, que ha sido imitado por muchos, pero nunca igualado del todo.

La receta que se presenta aquí es un intento de recrear el sabor del pollo KFC en casa, utilizando ingredientes y técnicas accesibles para el cocinero casero. Si bien no es la receta original, ofrece una aproximación deliciosa y una alternativa para disfrutar de un pollo frito similar sin salir de casa.

Ingredientes

Para el pollo:

  • Muslos de pollo (7): Los muslos son una de las piezas más jugosas y sabrosas del pollo. Puedes usar otras piezas, como pechugas o alitas, pero el tiempo de cocción variará.
  • Leche (500 ml): La leche se utiliza para marinar el pollo, ayudando a ablandarlo y a que los sabores de las especias penetren mejor.
  • Sal (1 cucharadita): La sal realza el sabor del pollo y ayuda a sazonar la carne durante el marinado.
  • Pimienta negra en polvo (1 cucharadita): La pimienta negra aporta un toque picante y aromático al pollo.
  • Orégano en polvo (1 cucharadita): El orégano añade un sabor herbal y ligeramente amargo que complementa el sabor del pollo.
  • Ajo en polvo (1 cucharadita): El ajo en polvo aporta un sabor intenso y aromático al pollo.
  • Hojas de laurel (2): Las hojas de laurel añaden un sabor sutil y aromático al marinado.
  • Pimienta entera (6 granos): Los granos de pimienta enteros liberan su sabor lentamente durante el marinado, aportando un toque picante más suave que la pimienta molida.

Para el empanizado:

  • Huevos (3): Los huevos batidos se utilizan para crear una capa adhesiva que ayudará a que la harina y el pan rallado se adhieran al pollo.
  • Leche (2 cucharadas): La leche se añade a los huevos batidos para diluirlos ligeramente y facilitar el empanizado.
  • Sal (1/2 cucharadita): La sal sazona la mezcla de huevo y leche.
  • Pimienta negra en polvo (1/2 cucharadita): La pimienta negra añade un toque picante a la mezcla de huevo y leche.
  • Orégano en polvo (1/2 cucharadita): El orégano aporta un sabor herbal a la mezcla de huevo y leche.
  • Harina de trigo (125 g / 1 taza): La harina de trigo es la base del empanizado seco.
  • Maicena (60 g / 1/2 taza): La maicena, o fécula de maíz, ayuda a que el empanizado quede más crujiente.
  • Sal (1 cucharadita): La sal sazona la mezcla de harina y maicena.
  • Pimienta negra en polvo (1 cucharadita): La pimienta negra aporta un toque picante a la mezcla de harina y maicena.
  • Orégano en polvo (1 cucharadita): El orégano añade un sabor herbal a la mezcla de harina y maicena.
  • Ajo en polvo (1 cucharadita): El ajo en polvo aporta un sabor intenso y aromático a la mezcla de harina y maicena.
  • Pimentón rojo en polvo (1 cucharadita): El pimentón rojo, también conocido como paprika, añade color y un sabor ligeramente ahumado a la mezcla de harina y maicena.
  • Cebolla en polvo (1 cucharadita): La cebolla en polvo aporta un sabor dulce y aromático a la mezcla de harina y maicena.
  • Pan rallado (cantidad necesaria): El pan rallado es la capa final del empanizado y aporta la textura crujiente característica del pollo frito estilo KFC.
  • Aceite (cantidad necesaria): Se necesita suficiente aceite para freír los muslos de pollo. Se recomienda usar un aceite con un punto de humo alto, como el aceite de canola, de maní o de girasol.

Instrucciones paso a paso

Paso 1: Marinar el pollo

  1. En una sartén grande o una olla profunda, coloca los 7 muslos de pollo.
  2. Vierte 500 ml de leche sobre los muslos, asegurándote de que queden parcialmente cubiertos.
  3. Añade 1 cucharadita de sal, 1 cucharadita de pimienta negra en polvo, 1 cucharadita de orégano en polvo, 1 cucharadita de ajo en polvo, 2 hojas de laurel y 6 granos de pimienta entera a la leche.
  4. Mezcla ligeramente para distribuir las especias.
  5. Lleva la sartén a fuego medio, tapa y cocina durante 10 minutos.
  6. Después de 10 minutos, destapa la sartén y voltea los muslos de pollo para que se cocinen por el otro lado.
  7. Vuelve a tapar y cocina durante otros 10 minutos.
  8. Retira la sartén del fuego y reserva los muslos de pollo. Deja que se enfríen un poco antes de proceder con el empanizado.

Paso 2: Preparar la mezcla de huevo

  1. En un tazón mediano, casca 3 huevos.
  2. Añade 2 cucharadas de leche a los huevos.
  3. Agrega 1/2 cucharadita de sal, 1/2 cucharadita de pimienta negra en polvo y 1/2 cucharadita de orégano en polvo.
  4. Bate bien todos los ingredientes con un tenedor o un batidor de mano hasta que estén completamente integrados y la mezcla esté homogénea. Reserva.

Paso 3: Preparar la mezcla de harina y especias

  1. En un tazón grande, combina 125 g (1 taza) de harina de trigo y 60 g (1/2 taza) de maicena.
  2. Añade 1 cucharadita de sal, 1 cucharadita de pimienta negra en polvo, 1 cucharadita de orégano en polvo, 1 cucharadita de ajo en polvo, 1 cucharadita de pimentón rojo en polvo y 1 cucharadita de cebolla en polvo.
  3. Mezcla bien todos los ingredientes secos con una cuchara o un batidor de mano hasta que las especias estén distribuidas uniformemente en la harina y la maicena.

Paso 4: Empanizar el pollo

  1. Prepara un plato o una bandeja con suficiente pan rallado.
  2. Toma un muslo de pollo marinado y pásalo por la mezcla de harina y especias, asegurándote de que quede bien cubierto por todos lados. Presiona ligeramente para que la harina se adhiera.
  3. Luego, sumerge el muslo enharinado en la mezcla de huevo y leche, cubriéndolo completamente.
  4. Finalmente, pasa el muslo por el pan rallado, presionando suavemente para que se adhiera bien al pollo.
  5. Coloca el muslo empanizado en un plato limpio o una bandeja y repite el proceso con los muslos restantes.

Paso 5: Freír el pollo

  1. En una sartén grande y profunda, calienta suficiente aceite a fuego medio. La cantidad de aceite dependerá del tamaño de la sartén, pero debe haber al menos unos 5 cm de profundidad para que los muslos se frían correctamente.
  2. Para comprobar si el aceite está a la temperatura adecuada, puedes echar un poco de pan rallado en el aceite. Si burbujea y sube a la superficie, el aceite está listo.
  3. Con cuidado, coloca los muslos de pollo empanizados en el aceite caliente, sin amontonarlos. Es posible que tengas que freírlos en tandas, dependiendo del tamaño de tu sartén.
  4. Fríe los muslos durante aproximadamente 6-8 minutos por cada lado, o hasta que estén dorados y crujientes, y la carne esté bien cocida. El tiempo de cocción puede variar dependiendo del tamaño de los muslos y de la temperatura del aceite.
  5. Usa unas pinzas o una espumadera para voltear los muslos a la mitad de la cocción y asegurar una fritura uniforme.
  6. Una vez que los muslos estén cocidos, retíralos del aceite con una espumadera y colócalos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.

Paso 6: Servir

  1. Deja que el pollo frito repose sobre el papel absorbente durante unos minutos para que se enfríe ligeramente y el exceso de aceite se escurra.
  2. Sirve el pollo frito estilo KFC caliente, acompañado de tus guarniciones favoritas.

Consejos útiles

  • Para un sabor más auténtico, puedes usar suero de leche en lugar de leche para marinar el pollo. El suero de leche aportará un sabor ligeramente ácido y ayudará a que el pollo quede aún más tierno.
  • Si no tienes maicena, puedes usar harina de trigo adicional, pero el empanizado no quedará tan crujiente.
  • Puedes ajustar la cantidad de especias a tu gusto. Si te gusta el pollo más picante, añade una pizca de cayena en polvo o chile en polvo a la mezcla de harina.
  • Es importante no sobrecargar la sartén al freír el pollo. Si los muslos están demasiado juntos, no se dorarán uniformemente y el aceite se enfriará demasiado.
  • Si tienes un termómetro de cocina, puedes usarlo para verificar la temperatura interna del pollo. Debe alcanzar los 74°C (165°F) para asegurarse de que esté bien cocido.
  • Para mantener el pollo caliente mientras fríes las tandas restantes, puedes colocar los muslos ya fritos en un horno precalentado a baja temperatura (unos 90°C / 200°F).

Detalles

  • Tiempo de preparación: El marinado del pollo toma aproximadamente 20 minutos (más el tiempo de cocción en la leche). La preparación del empanizado y el empanizado del pollo toman unos 15 minutos.
  • Tiempo de cocción: El tiempo de fritura es de aproximadamente 12-16 minutos por tanda.
  • Tiempo total: El tiempo total para preparar esta receta es de aproximadamente 1 hora, sin contar el tiempo de enfriado.
  • Rendimiento: Esta receta rinde para 7 porciones (7 muslos de pollo).
  • Categoría: Este plato se clasifica como plato principal.
  • Método: Los métodos de cocción utilizados son hervir (para el marinado) y freír.
  • Cocina: Esta receta es una imitación del estilo de pollo frito de la cadena de restaurantes estadounidense KFC.
  • Dieta: Esta receta no es apta para vegetarianos ni veganos. Se puede adaptar para dietas sin gluten utilizando pan rallado sin gluten y asegurándose de que todos los demás ingredientes sean libres de gluten.

Notas

  • Puedes usar otras piezas de pollo en lugar de muslos, como pechugas, alitas o contramuslos. Sin embargo, ten en cuenta que el tiempo de cocción variará según el tamaño y el grosor de las piezas.
  • Si no tienes pan rallado, puedes hacer el tuyo propio triturando pan seco en un procesador de alimentos o licuadora. También puedes usar copos de maíz triturados o galletas saladas trituradas como alternativa.
  • Para un empanizado más grueso, puedes repetir el proceso de pasar el pollo por la harina, el huevo y el pan rallado una segunda vez.
  • El aceite usado para freír el pollo se puede reutilizar una o dos veces más. Déjalo enfriar completamente, cuélalo a través de una gasa o un filtro de café para eliminar los restos de comida y guárdalo en un recipiente hermético en un lugar fresco y oscuro.
  • El pollo frito estilo KFC es mejor comerlo recién hecho, cuando está más crujiente. Sin embargo, las sobras se pueden guardar en el refrigerador hasta por 3 días y recalentarse en el horno o en una freidora de aire para que recuperen parte de su textura crujiente.

Preguntas frecuentes

  1. ¿Puedo hornear el pollo en lugar de freírlo?

    Sí, puedes hornear el pollo en lugar de freírlo para una versión más saludable. Coloca los muslos empanizados en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino y hornea a 200°C (400°F) durante aproximadamente 30-40 minutos, o hasta que estén bien cocidos y dorados. Voltea los muslos a la mitad del tiempo de cocción para que se doren uniformemente. Ten en cuenta que el empanizado no quedará tan crujiente como cuando se fríe.

  2. ¿Puedo usar pechugas de pollo deshuesadas y sin piel?

    Sí, puedes usar pechugas de pollo deshuesadas y sin piel, pero el tiempo de cocción será menor. Para pechugas de tamaño mediano, fríelas durante unos 4-5 minutos por cada lado, o hasta que estén bien cocidas. También puedes cortarlas en tiras o trozos más pequeños para hacer nuggets de pollo.

  3. ¿Cómo puedo hacer que el pollo quede más crujiente?

    Para obtener un pollo más crujiente, asegúrate de que el aceite esté a la temperatura adecuada antes de freír. Un termómetro de cocina es útil para esto. La temperatura ideal del aceite es de 175-180°C (350-360°F). Además, no amontones el pollo en la sartén, ya que esto hará que la temperatura del aceite baje y el pollo no se dore correctamente. La maicena en la mezcla de harina también ayuda a crear una corteza más crujiente.

  4. ¿Puedo preparar el pollo con anticipación?

    Puedes marinar el pollo con anticipación y guardarlo en el refrigerador hasta por 24 horas. También puedes empanizar el pollo unas horas antes de freírlo y guardarlo en el refrigerador, cubierto con papel film. Sin embargo, es mejor freír el pollo justo antes de servirlo para que esté lo más crujiente posible.

  5. ¿Qué puedo hacer con las sobras de pollo frito?

    Las sobras de pollo frito se pueden usar en una variedad de platos. Puedes desmenuzarlas y añadirlas a ensaladas, sándwiches, tacos o wraps. También puedes usarlas como relleno para empanadas o croquetas. Otra opción es recalentarlas y servirlas con una salsa diferente, como salsa barbacoa, miel mostaza o una salsa picante.

Instrucciones de almacenamiento

El pollo frito estilo KFC se debe guardar en el refrigerador, en un recipiente hermético o bien envuelto en papel film o papel de aluminio. Se conservará en buen estado hasta por 3 días.

Para recalentar el pollo frito y que recupere parte de su textura crujiente, es mejor usar el horno o una freidora de aire en lugar del microondas. Precalienta el horno a 175°C (350°F) y coloca el pollo en una bandeja para hornear. Hornea durante 10-15 minutos, o hasta que esté bien caliente y crujiente. Si usas una freidora de aire, caliéntalo a 180°C (360°F) y cocina el pollo durante 3-5 minutos, o hasta que esté bien

Si usas una freidora de aire, caliéntalo a 180°C (360°F) y cocina el pollo durante 3-5 minutos, o hasta que esté bien caliente y crujiente.

También puedes recalentar el pollo en una sartén a fuego medio con un poco de aceite, volteándolo ocasionalmente hasta que esté caliente y crujiente. Sin embargo, ten en cuenta que recalentar el pollo puede hacer que se seque un poco.

No se recomienda congelar el pollo frito ya cocido, ya que la textura del empanizado se verá afectada al descongelarlo.

Recetas relacionadas

Si te ha gustado esta receta de pollo frito estilo KFC, aquí tienes otras recetas que te pueden interesar:

  • Alitas de pollo picantes: Alitas de pollo marinadas en una salsa picante y horneadas o fritas hasta que estén crujientes.
  • Pollo frito coreano: Pollo frito dos veces para obtener una textura extra crujiente, luego cubierto con una salsa dulce y picante a base de gochujang (pasta de chile coreano).
  • Nuggets de pollo caseros: Trozos de pechuga de pollo empanizados y horneados o fritos, perfectos para los niños o como aperitivo.
  • Pollo a la parmesana: Pechugas de pollo empanizadas y fritas, cubiertas con salsa de tomate y queso mozzarella, y luego horneadas hasta que el queso esté derretido y burbujeante.
  • Pollo al limón: Pollo frito o al horno con una salsa agridulce a base de limón, miel y ajo.

Conclusión

El pollo frito estilo KFC es un plato delicioso y popular que se puede recrear en casa con un poco de esfuerzo y los ingredientes adecuados. Esta receta te guía paso a paso para obtener un pollo jugoso por dentro y crujiente por fuera, con un sabor que se aproxima al del famoso restaurante de comida rápida.

Si bien la receta original de KFC es un secreto, esta versión casera te permitirá disfrutar de un pollo frito similar en la comodidad de tu hogar. Además, te da la libertad de ajustar los sabores y las especias a tu gusto, creando tu propia versión única de este clásico plato.

Anímate a preparar esta receta y sorprende a tu familia y amigos con un pollo frito estilo KFC hecho en casa. ¡Seguro que se convertirá en una de tus recetas favoritas!

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *