Introducción
Las galletas de avena y manzana son un bocadillo delicioso y saludable que es perfecto para cualquier momento del día. Estas galletas son especialmente atractivas porque se hacen sin harina, azúcar ni aceite. Esto las convierte en una excelente opción para las personas con restricciones dietéticas o para cualquiera que busque reducir su consumo de azúcares refinados y grasas no saludables.
Esta receta utiliza ingredientes naturales y saludables como la avena, las manzanas y los plátanos para crear una galleta sabrosa y satisfactoria. La avena proporciona una buena dosis de fibra, mientras que las manzanas y los plátanos añaden dulzura y humedad naturales. El resultado es una galleta masticable y deliciosa, a la vez que nutritiva.
Hacer estas galletas de avena y manzana en casa es un proceso sencillo que no requiere habilidades especiales para hornear. Los pasos son fáciles de seguir, e incluso los panaderos principiantes pueden lograr excelentes resultados. Esta receta es perfecta para cualquiera que quiera disfrutar de un bocadillo casero sin la culpa asociada con los dulces tradicionales.
Por qué te encantará esta receta
Hay muchas razones por las que te encantará esta receta de galletas de avena y manzana. En primer lugar, son increíblemente saludables. Sin harina, azúcar ni aceite, estas galletas son una opción mucho más saludable que la mayoría de las galletas compradas en la tienda. Son perfectas para quienes cuidan su peso o tienen necesidades dietéticas específicas.
En segundo lugar, estas galletas son deliciosas. La combinación de avena, manzanas y plátano crea un sabor y una textura únicos que son a la vez reconfortantes y satisfactorios. La dulzura natural de las manzanas y los plátanos, junto con la calidez de la canela, hace que estas galletas sean un verdadero placer.
Finalmente, esta receta es fácil de hacer y versátil. Puedes personalizar fácilmente las galletas agregando tus ingredientes favoritos, como nueces, semillas o frutos secos. El proceso es sencillo, lo que lo convierte en una receta divertida para hacer con niños o como un proyecto rápido de horneado para cualquier día de la semana.
INGREDIENTES QUE NECESITARÁS
Para hacer estas galletas de avena y manzana sin harina, azúcar ni aceite, necesitarás unos pocos ingredientes simples. La base de estas galletas es de 2 tazas de avena en hojuelas, que proporciona una textura masticable y abundantes beneficios nutricionales. Asegúrate de utilizar avena en hojuelas en lugar de avena instantánea para obtener mejores resultados.
Necesitarás 2 manzanas grandes, peladas y ralladas, para agregar humedad y dulzura natural. Cualquier variedad de manzana servirá, pero las manzanas más dulces como las Fuji o las Gala funcionan especialmente bien. También necesitarás 1 plátano maduro, que servirá como edulcorante natural y aglutinante.
Para agregar sabor, necesitarás 1 cucharadita de canela en polvo, que complementa perfectamente las manzanas y la avena. Si lo deseas, también puedes agregar 1 cucharadita de extracto de vainilla para darle un toque extra de sabor. Para darle más volumen a las galletas, puedes incluir 1/2 cucharadita de polvo para hornear.
Finalmente, puedes agregar 1/2 taza de pasas o dátiles picados para darle más dulzura y textura (opcional). Una pizca de sal también puede realzar los sabores, pero es totalmente opcional. Estos ingredientes simples se combinan para crear una galleta deliciosa y saludable que seguramente disfrutarás.
CÓMO HACER Galletas de avena y manzana sin harina, azúcar ni aceite
Comienza precalentando tu horno a 180°C (350°F). Cubre una bandeja para hornear con papel pergamino o una lámina de silicona para evitar que las galletas se peguen. Esto también facilita la limpieza.
En un tazón, tritura 1 plátano maduro con un tenedor hasta obtener un puré suave. Agrega 2 manzanas grandes, peladas y ralladas, al puré de plátano. Mezcla bien para combinar. Si estás usando extracto de vainilla, agrégalo en este paso.
En el mismo tazón, agrega 2 tazas de avena en hojuelas, 1 cucharadita de canela en polvo y 1/2 taza de pasas o dátiles picados si los estás usando. Si quieres que las galletas queden un poco más esponjosas, agrega 1/2 cucharadita de polvo para hornear. Agrega una pizca de sal si lo deseas. Mezcla todos los ingredientes hasta que estén completamente integrados.
INSTRUCCIONES PASO A PASO
Paso 1: Precalentar el horno y preparar la bandeja para hornear. Precalienta tu horno a 180°C (350°F). Cubre una bandeja para hornear con papel pergamino o una lámina de silicona para hornear. Esto evitará que las galletas se peguen y facilitará la limpieza.
Paso 2: Preparar los ingredientes húmedos. En un tazón grande, tritura 1 plátano maduro con un tenedor hasta que esté suave. Pela y ralla 2 manzanas grandes y agrégalas al plátano triturado. Mezcla bien los ingredientes húmedos. Si estás usando extracto de vainilla, agrégalo ahora y mezcla.
Paso 3: Incorporar la avena. Agrega 2 tazas de avena en hojuelas al tazón con los ingredientes húmedos. Incorpora 1 cucharadita de canela en polvo. Si estás usando pasas o dátiles, agrégalos en este momento. Si estás usando polvo para hornear, agrégalo también. Agrega una pizca de sal si lo deseas.
Paso 4: Mezclar los ingredientes. Mezcla bien todos los ingredientes hasta que estén completamente integrados. La mezcla estará húmeda y algo pegajosa. Asegúrate de que la avena esté completamente cubierta con los ingredientes húmedos.
Paso 5: Formar las galletas. Con una cuchara, toma porciones de la mezcla y colócalas en la bandeja para hornear preparada. Forma cada porción en una galleta redonda y plana. Puedes usar el dorso de la cuchara para aplanar ligeramente cada galleta.
Paso 6: Hornear. Coloca la bandeja para hornear en el horno precalentado. Hornea las galletas durante 15-20 minutos. Las galletas deben estar doradas en los bordes y firmes al tacto cuando estén listas.
Paso 7: Enfriar. Retira la bandeja para hornear del horno. Deja que las galletas se enfríen en la bandeja para hornear durante unos minutos. Luego, transfiérelas a una rejilla para que se enfríen completamente.
Paso 8: Almacenar. Una vez que las galletas se hayan enfriado por completo, guárdalas en un recipiente hermético. Se pueden almacenar a temperatura ambiente hasta por tres días o en el refrigerador hasta por una semana.
CONSEJOS ÚTILES
Para obtener los mejores resultados, utiliza avena en hojuelas en lugar de avena instantánea. La avena en hojuelas proporciona una mejor textura y ayuda a que las galletas mantengan su forma. La avena instantánea puede hacer que las galletas queden demasiado blandas.
Si no tienes plátanos maduros a la mano, puedes usar puré de manzana como sustituto. Utiliza aproximadamente 1/2 taza de puré de manzana sin azúcar en lugar de un plátano. Esto mantendrá las galletas húmedas y dulces.
Siéntete libre de personalizar las galletas agregando tus ingredientes favoritos. Las nueces picadas, las semillas, los trocitos de chocolate amargo o los frutos secos son excelentes adiciones. Agrega hasta 1/2 taza de ingredientes adicionales a la masa.
Para obtener un sabor más rico, tuesta la avena antes de usarla. Extiende la avena en una bandeja para hornear y tuéstala en el horno a 180°C (350°F) durante unos 5-7 minutos, hasta que esté ligeramente dorada y fragante.
Asegúrate de que las manzanas estén finamente ralladas para que se distribuyan uniformemente en la masa. Los trozos grandes de manzana pueden hacer que las galletas queden demasiado húmedas y evitar que se cocinen de manera uniforme.
Si quieres que las galletas sean más dulces sin agregar azúcar, considera usar una variedad de manzana más dulce, como Fuji o Gala. También puedes agregar una pizca de stevia o eritritol a la masa.
DETALLES
Tiempo de preparación: 15 minutos. Esto incluye el tiempo que se tarda en pelar y rallar las manzanas, triturar el plátano y medir los demás ingredientes.
Tiempo de cocción: 15-20 minutos. Las galletas deben estar doradas en los bordes y firmes al tacto cuando estén listas.
Tiempo total: 30-35 minutos. Esto incluye tanto el tiempo de preparación como el tiempo de cocción, más unos minutos para que las galletas se enfríen ligeramente en la bandeja para hornear.
Rendimiento: Alrededor de 12-15 galletas. El número exacto de galletas dependerá del tamaño de cada porción.
Categoría: Postre/Bocadillo. Estas galletas son un bocadillo saludable que también se puede disfrutar como postre.
Método: Horneado. Las galletas se hornean en un horno precalentado a 180°C (350°F).
Cocina: Saludable/Vegetariana. Estas galletas están hechas con ingredientes naturales y no contienen harina, azúcar ni aceite.
Dieta: Sin harina, sin azúcar, sin aceite. Estas galletas son adecuadas para diversas necesidades dietéticas, incluidas las dietas sin gluten (si se utiliza avena certificada sin gluten).
NOTAS
Si no tienes papel pergamino o una lámina de silicona para hornear, puedes engrasar ligeramente la bandeja para hornear. Sin embargo, usar papel pergamino o una lámina de silicona es la mejor manera de evitar que las galletas se peguen y garantizar una limpieza fácil.
Para una galleta más masticable, reduce ligeramente el tiempo de cocción. Para una galleta más crujiente, cocina unos minutos más. Ten cuidado de no hornearlas demasiado, ya que pueden volverse secas y quebradizas.
Estas galletas son mejores cuando están frescas, pero se pueden almacenar en un recipiente hermético a temperatura ambiente hasta por tres días. Para un almacenamiento más prolongado, guárdalas en el refrigerador hasta por una semana. También se pueden congelar hasta por tres meses.
Si estás usando dátiles en lugar de pasas, asegúrate de picarlos finamente para que se distribuyan uniformemente en la masa. Los dátiles Medjool son una buena opción por su textura suave y sabor a caramelo.
Cuando ralles las manzanas, utiliza el lado grueso de un rallador de caja para obtener la mejor textura. Si no tienes un rallador, puedes picar finamente las manzanas, pero asegúrate de que los trozos sean muy pequeños.
PREGUNTAS FRECUENTES
P: ¿Puedo usar otro tipo de fruta en lugar de manzanas? R: Sí, puedes experimentar con otras frutas como peras o zanahorias ralladas. Ajusta el tiempo de cocción según sea necesario, ya que diferentes frutas pueden tener diferentes contenidos de humedad.
P: ¿Puedo usar avena instantánea en lugar de avena en hojuelas? R: Es mejor usar avena en hojuelas para esta receta, ya que proporcionan una mejor textura. La avena instantánea puede hacer que las galletas queden demasiado blandas y menos masticables.
P: ¿Cómo puedo hacer que estas galletas sean más dulces sin agregar azúcar? R: Puedes agregar más pasas, dátiles picados o un poco de puré de manzana sin azúcar. Usar una variedad de manzana más dulce, como Fuji o Gala, también puede aumentar la dulzura.
P: ¿Puedo hacer estas galletas sin plátano? R: El plátano ayuda a unir las galletas y agrega dulzura. Si necesitas sustituirlo, puedes usar 1/2 taza de puré de manzana sin azúcar o yogur. Es posible que debas ajustar los demás ingredientes según sea necesario.
P: ¿Por qué mis galletas quedaron demasiado blandas? R: Si tus galletas quedaron demasiado blandas, es posible que necesiten hornearse por más tiempo. Asegúrate de que tu horno esté precalentado a la temperatura correcta y hornea las galletas hasta que estén doradas en los bordes y firmes al tacto.
P: ¿Puedo agregar nueces o semillas a estas galletas? R: Sí, puedes agregar hasta 1/2 taza de tus nueces o semillas favoritas. Las nueces picadas, las almendras, las semillas de girasol o las semillas de calabaza son excelentes adiciones.
INSTRUCCIONES DE ALMACENAMIENTO
Una vez que las galletas de avena y manzana se hayan enfriado por completo, guárdalas en un recipiente hermético. Se pueden almacenar a temperatura ambiente hasta por tres días. Para mantenerlas frescas por más tiempo, guarda las galletas en el refrigerador. Ahí durarán hasta por una semana.
Si quieres almacenar las galletas por un período más prolongado, puedes congelarlas. Coloca las galletas enfriadas en una sola capa sobre una bandeja para hornear y congélalas hasta que estén sólidas. Luego, transfiérelas a una bolsa o recipiente apto para el congelador. Las galletas congeladas se pueden almacenar hasta por tres meses.
Cuando estés listo para disfrutar de las galletas congeladas, descongélalas a temperatura ambiente durante unas horas o en el refrigerador durante la noche. También puedes recalentarlas en un horno a baja temperatura durante unos minutos para que queden crujientes.
Asegúrate de etiquetar el recipiente o la bolsa con la fecha para llevar un registro de cuánto tiempo se han almacenado las galletas. Esto te ayudará a mantener su frescura y calidad.
Recetas relacionadas
Si disfrutaste de esta receta de galletas de avena y manzana sin harina, azúcar ni aceite, es posible que te interesen estas otras recetas de galletas saludables. Estas opciones son fáciles de hacer y utilizan ingredientes naturales, perfectas para un bocadillo sin culpa.
Galletas de mantequilla de maní y plátano: Estas galletas combinan la mantequilla de maní, los plátanos maduros y la avena para un bocadillo delicioso y satisfactorio. A menudo se hacen sin harina, azúcar ni lácteos, lo que las convierte en una opción saludable. Son perfectas para los amantes de la mantequilla de maní.
Galletas de chispas de chocolate y avena: Una versión más saludable de las clásicas galletas de chispas de chocolate, esta receta utiliza avena, puré de manzana y una cantidad reducida de azúcar. Las chispas de chocolate amargo añaden un rico sabor sin demasiada dulzura.
Galletas de desayuno de quinoa: Estas galletas están llenas de ingredientes nutritivos como quinoa, avena, nueces y semillas. Son perfectas para un desayuno rápido o un bocadillo para llevar. Puedes personalizarlas con tus frutas secas y nueces favoritas.
Galletas de almendra y coco: Estas galletas se hacen con harina de almendra, coco rallado y un toque de miel o jarabe de arce para darles dulzura. No contienen gluten y tienen un delicioso sabor a nuez. Son perfectas para quienes aman el coco.
Galletas de zanahoria y pasas: Estas galletas incorporan zanahorias ralladas, pasas y especias calientes para una versión saludable del clásico pastel de zanahoria. A menudo se hacen con avena y un edulcorante natural como el jarabe de arce.
CONCLUSIÓN
En conclusión, estas galletas de avena y manzana sin harina, azúcar ni aceite son un bocadillo delicioso y saludable que es fácil de hacer y perfecto para cualquier ocasión. Al utilizar ingredientes naturales como la avena, las manzanas y los plátanos, puedes disfrutar de un bocadillo sin culpa que es a la vez sabroso y nutritivo. La receta es versátil y te permite agregar tus ingredientes favoritos para crear una galleta que se adapte a tus gustos.
Ya sea que estés buscando un bocadillo saludable, un desayuno rápido o un postre sin culpa, estas galletas seguramente te satisfarán. Son perfectas para personas con restricciones dietéticas o cualquiera que busque reducir su consumo de azúcares refinados y grasas no saludables. Con su textura masticable y su sabor reconfortante, estas galletas seguramente se convertirán en un elemento básico en tu hogar.
Hacer tus propios bocadillos, como estas galletas de avena y manzana, es una excelente manera de controlar los ingredientes y asegurarte de que estás comiendo algo que es bueno para ti. Es un proyecto de cocina gratificante que puede disfrutar toda la familia. Prueba esta receta y disfruta de la satisfacción de hacer un bocadillo delicioso y saludable desde cero.
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