Albóndigas de Carne al Horno

Introducción:

Las albóndigas de carne al horno son un plato clásico, reconfortante y versátil. Son una excelente opción para una comida familiar, una cena informal o incluso para llevar a una reunión. Esta receta ofrece una alternativa más saludable a las albóndigas fritas.

Esta receta es fácil de seguir, con ingredientes sencillos y pasos claros. Obtendrás unas albóndigas jugosas, sabrosas y con una textura tierna. Son perfectas para acompañar con tu salsa favorita.

Además de ser deliciosas, las albóndigas al horno son una forma práctica de preparar una comida completa. Puedes servirlas con pasta, arroz, puré de patatas o verduras al vapor.

Por qué te encantará esta receta:

Estas albóndigas de carne al horno son jugosas y sabrosas, gracias a la combinación de ingredientes y al método de cocción. No quedan secas ni duras, como puede ocurrir con algunas recetas de albóndigas al horno.

Son más saludables que las albóndigas fritas, ya que se cocinan con menos grasa. El horneado permite que las albóndigas se cocinen en sus propios jugos, conservando su sabor y humedad.

Es una receta muy versátil. Puedes adaptar los ingredientes a tus gustos, añadiendo otras verduras, especias o hierbas aromáticas. También puedes usar diferentes tipos de carne.

La preparación es sencilla y no requiere de técnicas culinarias complicadas. Mezclar los ingredientes, formar las albóndigas y hornearlas es todo lo que necesitas hacer.

Por último, es un plato que suele gustar a todos. Tanto niños como adultos disfrutarán de estas deliciosas albóndigas. Son perfectas para una comida familiar o para una reunión con amigos.

INGREDIENTES QUE NECESITARÁS:

Para preparar estas deliciosas albóndigas de carne al horno, necesitarás ingredientes frescos y fáciles de encontrar. La calidad de la carne es importante para obtener un buen resultado.

  • Carne molida de res: La carne molida de res es la base de estas albóndigas. Puedes usar carne molida magra o con un poco de grasa, según tu preferencia. La grasa aportará más sabor y jugosidad. 500 gramos.

  • Cebolla grande: La cebolla picada aporta sabor y humedad a las albóndigas. 1 unidad, finamente picada.

  • Dientes de ajo: El ajo picado realza el sabor de las albóndigas. 2 unidades, finamente picados.

  • Zanahoria: La zanahoria rallada aporta dulzura, humedad y un toque de color a las albóndigas. 1 unidad, finamente rallada.

  • Pan rallado: El pan rallado ayuda a ligar los ingredientes y a crear una textura tierna. Puedes usar pan rallado común o pan rallado sazonado. 100 gramos.

  • Huevo: El huevo actúa como aglutinante, ayudando a que las albóndigas mantengan su forma. 1 unidad.

  • Leche: La leche aporta humedad y suavidad a las albóndigas. Puedes usar leche entera, semidesnatada o incluso leche vegetal. 120 ml.

  • Salsa de tomate: La salsa de tomate aporta sabor y un toque de acidez a las albóndigas. Puedes usar salsa de tomate casera o comprada. 60 ml.

  • Perejil fresco picado: El perejil fresco aporta frescura y un toque de sabor herbal a las albóndigas. 2 cucharadas.

  • Mostaza (preferiblemente Dijon): La mostaza aporta un toque de sabor picante y ácido que complementa muy bien el sabor de la carne. 1 cucharada.

  • Sal: Para realzar el sabor de las albóndigas. 1 cucharadita.

  • Pimienta negra recién molida: Para dar un toque de picante. 1/2 cucharadita.

  • Queso parmesano rallado: El queso parmesano rallado aporta un toque de sabor umami y ayuda a crear una costra dorada en las albóndigas. 25 gramos.

CÓMO HACER “Albóndigas de Carne al Horno”:

El proceso de elaboración de estas albóndigas es muy sencillo. Se trata de mezclar todos los ingredientes, formar las albóndigas y hornearlas hasta que estén doradas y cocidas.

La clave para unas albóndigas jugosas es no mezclar en exceso los ingredientes. Mezcla solo hasta que estén combinados.

El horneado a temperatura moderada permite que las albóndigas se cocinen uniformemente y conserven su humedad.

INSTRUCCIONES PASO A PASO:

  1. Preparación inicial: Precalienta el horno a 180°C (350°F).

    Prepara una bandeja para hornear. Puedes cubrirla con papel de hornear para facilitar la limpieza, o simplemente engrasarla ligeramente.

    Pica finamente la cebolla y los dientes de ajo. Ralla finamente la zanahoria.

  2. Mezclar los ingredientes: En un bol grande, combina la carne molida de res, la cebolla picada, el ajo picado, la zanahoria rallada, el pan rallado, el huevo, la leche, la salsa de tomate, el perejil picado, la mostaza, la sal y la pimienta negra.

    Mezcla todos los ingredientes con las manos (limpias) o con una cuchara de madera, hasta que estén bien combinados. No mezcles en exceso, solo lo justo para que los ingredientes se integren.

    La mezcla debe ser húmeda pero no líquida. Si está demasiado húmeda, puedes añadir un poco más de pan rallado.

  3. Formar las albóndigas: Con las manos (ligeramente humedecidas para evitar que la carne se pegue), toma porciones de la mezcla y forma albóndigas del tamaño deseado.

    Puedes hacerlas pequeñas (del tamaño de una nuez) o más grandes (del tamaño de una pelota de golf).

    Coloca las albóndigas en la bandeja para hornear preparada, dejando un poco de espacio entre ellas.

  4. Añadir el queso parmesano: Espolvorea el queso parmesano rallado por encima de las albóndigas.

    El queso parmesano se derretirá y formará una costra dorada y sabrosa.

    Si no tienes queso parmesano, puedes usar otro tipo de queso rallado que te guste, como queso cheddar o queso manchego.

  5. Hornear las albóndigas: Introduce la bandeja en el horno precalentado.

    Hornea durante 25-30 minutos, o hasta que las albóndigas estén bien cocidas y doradas por encima.

    El tiempo de cocción puede variar dependiendo del tamaño de las albóndigas y de tu horno.

  6. Reposar y servir: Una vez que las albóndigas estén listas, retíralas del horno.

    Déjalas reposar durante unos minutos antes de servirlas. Esto permitirá que los jugos se redistribuyan y que las albóndigas estén más jugosas.

    Sirve las albóndigas calientes, solas o con tu salsa favorita.

CONSEJOS ÚTILES:

Para que las albóndigas queden más jugosas, puedes usar una mezcla de carne molida de res y cerdo.

Si no tienes perejil fresco, puedes usar perejil seco, pero reduce la cantidad a 1 cucharadita.

Puedes añadir otras verduras picadas a la mezcla, como pimiento rojo, calabacín o champiñones.

Para un toque picante, puedes añadir una pizca de cayena en polvo o unas gotas de salsa picante a la mezcla.

Si quieres unas albóndigas más ligeras, puedes usar pan rallado integral o avena molida en lugar de pan rallado común.

Puedes preparar la mezcla de las albóndigas con antelación y guardarla en la nevera hasta el momento de hornearlas.

Para que las albóndigas queden más doradas, puedes rociarlas con un poco de aceite de oliva antes de hornearlas.

Si no quieres usar el horno, puedes cocinar las albóndigas en una sartén con un poco de aceite, a fuego medio-alto, hasta que estén doradas y cocidas por dentro.

DETALLES:

  • Tiempo de preparación: 15 minutos.

  • Tiempo de cocción: 25-30 minutos.

  • Tiempo total: 40-45 minutos.

  • Rendimiento: Aproximadamente 20-25 albóndigas (dependiendo del tamaño).

  • Categoría: Plato principal, Aperitivo.

  • Método: Horneado.

  • Cocina: Internacional.

  • Dieta: (Depende de los ingredientes, puede adaptarse a diferentes dietas).

NOTAS:

Es importante no mezclar en exceso los ingredientes, ya que esto podría hacer que las albóndigas queden duras.

El tiempo de cocción puede variar dependiendo del tamaño de las albóndigas y de tu horno. Siempre es mejor comprobar si están bien cocidas insertando un termómetro de cocina en el centro de una albóndiga. La temperatura interna debe ser de al menos 74°C (165°F).

Si no vas a consumir las albóndigas inmediatamente, guárdalas en la nevera en un recipiente hermético. Se conservarán bien durante 3-4 días.

También puedes congelar las albóndigas, tanto crudas como cocidas.

Esta receta es una base excelente para experimentar. No dudes en añadir otros ingredientes que te gusten.

PREGUNTAS FRECUENTES:

  • ¿Puedo usar otro tipo de carne? Sí, puedes usar carne molida de cerdo, pollo, pavo o una mezcla de diferentes tipos de carne.

  • ¿Puedo hacer las albóndigas sin huevo? Sí, puedes omitir el huevo, pero las albóndigas pueden quedar un poco menos tiernas. Puedes añadir un poco más de leche o pan rallado para compensar la falta de huevo.

  • ¿Puedo usar pan rallado sazonado? Sí, puedes usar pan rallado sazonado, pero ten en cuenta que esto añadirá más sabor a las albóndigas.

  • ¿Qué hago si las albóndigas quedan secas? Asegúrate de no mezclar en exceso los ingredientes y de no hornearlas demasiado tiempo. También puedes añadir un poco más de leche o salsa de tomate a la mezcla.

  • ¿Puedo hacerlas sin gluten? Sí, usando pan rallado sin gluten.

  • ¿Se pueden hacer en una olla de cocción lenta? Sí, cocinándolas en salsa a baja temperatura durante varias horas.

  • ¿Son aptas para bebés? Sí, a partir de que puedan comer sólidos, ajustando la cantidad de sal y especias.

INSTRUCCIONES DE ALMACENAMIENTO:

Refrigeración (albóndigas crudas): Si no vas a hornear las albóndigas inmediatamente, puedes guardar la mezcla en la nevera, en un recipiente hermético, hasta por 24 horas. También puedes formar las albóndigas y colocarlas en una bandeja, cubrirlas con film transparente y refrigerarlas hasta el momento de hornearlas.

Refrigeración (albóndigas cocidas): Deja que las albóndigas cocidas se enfríen completamente a temperatura ambiente. Luego, transfiérelas a un recipiente hermético y guárdalas en la nevera. Se conservarán bien durante 3-4 días.

Congelación (albóndigas crudas): Forma las albóndigas y colócalas en una bandeja, separadas entre sí. Congélalas durante al menos 2 horas, o hasta que estén sólidas.

Luego, transfiere las albóndigas congeladas a una bolsa de congelación o a un recipiente hermético. Se conservarán bien en el congelador hasta por 3 meses. Para cocinarlas, no es necesario descongelarlas previamente; puedes hornearlas directamente congeladas, aumentando el tiempo de cocción en unos 5-10 minutos.

Congelación (albóndigas cocidas): Deja que las albóndigas cocidas se enfríen completamente. Luego, colócalas en una bandeja y congélalas durante al menos 2 horas.

Transfiere las albóndigas congeladas a una bolsa de congelación o a un recipiente hermético. Se conservarán bien en el congelador hasta por 2 meses. Para recalentarlas, puedes usar el horno, el microondas o una sartén.

RECETAS RELACIONADAS

Si te han gustado estas albóndigas de carne al horno, te sugiero probar estas otras recetas:

  • Albóndigas en salsa de tomate: La receta clásica de albóndigas, cocinadas en una deliciosa salsa de tomate casera.

  • Albóndigas suecas: Albóndigas con una salsa cremosa a base de caldo de carne y nata.

  • Espaguetis con albóndigas: Un plato clásico y reconfortante, perfecto para una comida familiar.

  • Pastel de carne: Similar a las albóndigas, pero en formato de pastel, ideal para compartir.

  • Lasaña de carne: Un clásico italiano con capas de pasta, carne, salsa bechamel y queso.

Estas recetas, junto con las albóndigas al horno, te ofrecen una variedad de opciones para disfrutar de la carne molida de una manera deliciosa y versátil. Son platos reconfortantes.

Todas son relativamente fáciles, y los resultados son deliciosos.

CONCLUSIÓN

Las albóndigas de carne al horno son un plato clásico, fácil de preparar y que gusta a todos. Esta receta te ofrece una versión saludable y deliciosa, con ingredientes sencillos y pasos claros.

Anímate a probar esta receta y a experimentar con diferentes ingredientes y salsas para crear tus propias variaciones. Las albóndigas son un plato versátil que se adapta a cualquier ocasión.

Esperamos que disfrutes de estas albóndigas tanto como nosotros. ¡Buen provecho! No dudes en compartir tus resultados y tus propias variaciones. La cocina es un espacio para la creatividad y la diversión, y estas albóndigas son una excelente manera de expresarla.

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