QUEQUE DE PLÁTANO

Introducción

El queque de plátano es un clásico de la repostería casera, apreciado por su textura húmeda, su sabor dulce y su aroma reconfortante. Es una excelente manera de aprovechar esos plátanos maduros que ya nadie quiere comer y transformarlos en un delicioso postre o merienda. La receta que te presentamos a continuación es sencilla y fácil de seguir.

Este queque es perfecto para cualquier ocasión, desde un desayuno rápido hasta una merienda con amigos o un postre después de la cena. Su versatilidad y sabor lo convierten en un favorito de grandes y chicos. Además, es una receta que se presta para la experimentación. Puedes añadirle diferentes ingredientes para darle un toque personal y crear tu propia versión única.

Sigue leyendo para descubrir los secretos de un queque de plátano perfecto, esponjoso y lleno de sabor. Aprende cómo prepararlo paso a paso y sorprende a tu familia y amigos con tus habilidades de repostería.

Por qué te encantará esta receta

Esta receta de queque de plátano es infalible y produce un resultado consistentemente delicioso. La combinación de plátanos maduros, azúcar, huevos y aceite crea un queque húmedo y tierno que se deshace en la boca. El toque de vainilla realza el sabor del plátano, creando una experiencia gustativa inigualable.

Una de las razones por las que te encantará esta receta es su simplicidad. No necesitas ser un experto en repostería para lograr un queque perfecto. Los pasos son claros y fáciles de seguir, y los ingredientes son comunes y accesibles. En poco tiempo, tendrás un postre casero que impresionará a todos.

Además, este queque es muy versátil. Puedes disfrutarlo solo o acompañado de una taza de té o café. También es una excelente base para crear postres más elaborados. Puedes cubrirlo con un glaseado, una crema de queso o simplemente espolvorearlo con azúcar glas. Las posibilidades son infinitas.

INGREDIENTES QUE NECESITARÁS

Para preparar este delicioso queque de plátano, necesitarás ingredientes básicos que probablemente ya tengas en tu cocina. La clave para un buen queque de plátano está en usar plátanos bien maduros. Estos no solo aportan más dulzura, sino también una textura más húmeda al queque.

Primero, necesitarás tres plátanos maduros. Mientras más maduros estén, mejor. Busca plátanos con la cáscara manchada de marrón. También necesitarás dos tazas de harina de trigo, que aportará la estructura al queque. Una taza de azúcar le dará la dulzura necesaria.

Media taza de aceite vegetal o mantequilla derretida (aproximadamente 115 gramos) aportará humedad y ternura. Tres huevos grandes ayudarán a ligar los ingredientes y a que el queque suba. Una cucharadita de esencia de vainilla realzará el sabor del plátano y le dará un toque aromático.

Para que el queque quede esponjoso, necesitarás una cucharadita de polvo de hornear y media cucharadita de bicarbonato de sodio. Una pizca de sal realzará los sabores de los demás ingredientes. Opcionalmente, puedes añadir media cucharadita de canela en polvo para darle un toque especiado y media taza de nueces picadas o chispas de chocolate para añadir textura y sabor.

CÓMO HACER QUEQUE DE PLÁTANO

Hacer este queque de plátano es un proceso sencillo que se divide en unos pocos pasos básicos. Primero, se precalienta el horno y se prepara el molde. Luego, se preparan los plátanos, se mezclan los ingredientes húmedos por un lado y los secos por otro. Después, se combinan ambas mezclas y se hornea hasta que el queque esté dorado y cocido.

La clave para un queque de plátano esponjoso es no mezclar en exceso la masa. Una vez que los ingredientes secos se combinan con los húmedos, solo hay que mezclar hasta que estén integrados. Si se mezcla demasiado, el queque puede quedar duro.

Finalmente, se deja enfriar el queque antes de desmoldarlo y servirlo. Sigue estos sencillos pasos y disfruta de un delicioso queque de plátano casero.

INSTRUCCIONES PASO A PASO

1. Precalentar el horno y preparar el molde:

Precalienta el horno a 180°C (350°F). Es importante que el horno esté a la temperatura correcta para que el queque se cocine de manera uniforme. Engrasa y enharina un molde para queque. Esto evitará que el queque se pegue al molde y facilitará su desmoldado.

Puedes usar mantequilla o aceite en aerosol para engrasar el molde. Luego, espolvorea harina sobre toda la superficie, sacudiendo el exceso. Asegúrate de que todo el interior del molde esté cubierto. Un molde de aproximadamente 23×13 cm (9×5 pulgadas) es ideal.

Este paso es fundamental para un horneado exitoso.

2. Preparar los plátanos:

Pela los tres plátanos maduros y colócalos en un tazón mediano. Con un tenedor, aplástalos hasta obtener un puré suave. Puedes dejar algunos trocitos de plátano si prefieres una textura más rústica en tu queque.

Los plátanos muy maduros son ideales para esta receta, ya que son más dulces y tienen una textura más suave. No te preocupes si tienen la cáscara muy oscura, eso es señal de que están perfectos para hornear.

Este paso libera los sabores y azúcares naturales del plátano.

3. Mezclar los ingredientes húmedos:

En un tazón grande, bate los tres huevos con la taza de azúcar. Usa una batidora eléctrica o un batidor de varillas. Bate hasta que los ingredientes estén bien integrados y la mezcla tenga un color amarillo pálido, aproximadamente 2-3 minutos.

Añade la media taza de aceite vegetal (o mantequilla derretida) y la cucharadita de esencia de vainilla a la mezcla de huevos y azúcar. Bate nuevamente hasta que todos los ingredientes estén bien combinados. La mezcla se volverá más suave y brillante.

Incorpora el puré de plátano a la mezcla de ingredientes húmedos. Mezcla con una espátula o cuchara de madera hasta que esté bien integrado. No te preocupes si la mezcla se ve un poco cortada, es normal.

4. Mezclar los ingredientes secos:

En otro tazón, tamiza las dos tazas de harina de trigo, la cucharadita de polvo de hornear, la media cucharadita de bicarbonato de sodio y la pizca de sal. Si decides usar canela, añádela también en este paso. Tamizar los ingredientes secos ayuda a eliminar grumos y a que el queque quede más esponjoso.

Mezcla bien los ingredientes secos con un batidor de varillas o un tenedor. Asegúrate de que el polvo de hornear y el bicarbonato de sodio estén bien distribuidos para que el queque suba de manera uniforme.

Este paso es importante para la textura final del queque.

5. Combinar los ingredientes húmedos y secos:

Poco a poco, añade los ingredientes secos a la mezcla de ingredientes húmedos. Hazlo en dos o tres adiciones, mezclando suavemente después de cada adición. Usa una espátula de goma o una cuchara de madera para este paso.

Mezcla solo hasta que los ingredientes estén combinados y no queden rastros de harina seca. Es importante no mezclar en exceso en este punto. Si mezclas demasiado, el gluten de la harina se desarrollará demasiado, y el queque quedará duro en lugar de esponjoso.

Este paso es crucial para la textura final del queque.

6. Agregar extras (opcional):

Si quieres añadir un toque extra de sabor y textura a tu queque, este es el momento de hacerlo. Incorpora media taza de nueces picadas o chispas de chocolate a la masa. Mezcla suavemente con una espátula hasta que estén distribuidas de manera uniforme.

También puedes experimentar con otros ingredientes, como pasas, arándanos secos o trozos de otras frutas. Asegúrate de no agregar demasiados extras, ya que esto puede afectar la textura del queque.

Este paso es completamente opcional, pero añade un toque delicioso.

7. Hornear el queque:

Vierte la masa en el molde para queque que preparaste anteriormente. Extiende la masa uniformemente en el molde con una espátula. Dale unos golpecitos suaves al molde sobre la encimera para eliminar cualquier burbuja de aire grande.

Hornea en el horno precalentado durante 50-60 minutos. El queque estará listo cuando al insertar un palillo de madera o un cuchillo fino en el centro, este salga limpio. La parte superior del queque debe estar dorada y ligeramente firme al tacto.

Si notas que el queque se está dorando demasiado rápido en la superficie, puedes cubrirlo con papel de aluminio durante los últimos 15-20 minutos de cocción. Esto evitará que se queme la parte superior mientras se termina de cocinar el interior.

8. Enfriar y servir:

Una vez que el queque esté horneado, retíralo del horno y déjalo enfriar en el molde durante unos 10 minutos. Luego, invierte el molde sobre una rejilla para desmoldar el queque. Deja que el queque se enfríe completamente sobre la rejilla antes de cortarlo y servirlo.

Si intentas desmoldar el queque demasiado pronto, puede romperse. Si lo dejas enfriar demasiado tiempo en el molde, puede humedecerse y pegarse. Dejarlo enfriar durante 10 minutos en el molde es el tiempo ideal.

¡Disfruta de tu delicioso queque de plátano casero!

CONSEJOS ÚTILES

Usa plátanos muy maduros para obtener el mejor sabor y humedad. Mientras más manchas marrones tengan en la cáscara, mejor. Puedes incluso usar plátanos que estén casi completamente negros. Los plátanos maduros aportan una dulzura natural al queque.

No mezcles en exceso la masa después de agregar los ingredientes secos. Mezclar demasiado puede hacer que el queque quede duro. Recuerda mezclar solo hasta integrar los ingredientes. La clave es la suavidad en este paso.

Si no tienes nueces, puedes usar otros frutos secos como almendras, avellanas o pecanas. También puedes usar semillas de girasol o calabaza. Asegúrate de picarlos antes de añadirlos a la masa. Las semillas aportan un toque crujiente.

Para un glaseado sencillo, mezcla una taza de azúcar glas con unas cucharadas de leche o jugo de limón hasta obtener la consistencia deseada. Vierte el glaseado sobre el queque enfriado. El glaseado le da una presentación atractiva.

Puedes agregar una cucharadita de canela a la masa para darle un sabor más especiado al queque. La canela combina muy bien con el plátano. Experimenta con otras especias también.

DETALLES

Tiempo de preparación: 20 minutos

Tiempo de cocción: 50-60 minutos

Tiempo total: 1 hora y 10 minutos, más el tiempo de enfriamiento

Rendimiento: 8-10 porciones

Categoría: Postre, Repostería, Panadería

Método: Horneado

Cocina: Internacional

Dieta: Vegetariana. Puede adaptarse a una dieta sin gluten utilizando una mezcla de harina sin gluten adecuada para repostería.

NOTAS

Si no tienes un molde para queque, puedes usar un molde para pan de 23×13 cm (9×5 pulgadas). También puedes usar un molde redondo de 23 cm (9 pulgadas) de diámetro, pero el tiempo de cocción puede variar ligeramente. Ajusta el tiempo según tu horno y el molde.

Para un queque extra húmedo, puedes agregar un cuarto de taza de yogur natural o crema agria a la mezcla de ingredientes húmedos. Esto añadirá una textura aún más suave y un sabor ligeramente ácido que complementa muy bien al plátano. El yogurt es un excelente aliado.

Si quieres hacer muffins en lugar de un queque grande, puedes usar esta misma receta. Divide la masa en moldes para muffins y hornéalos durante 20-25 minutos, o hasta que al insertar un palillo, este salga limpio. Los muffins son una excelente alternativa.

Puedes congelar el queque de plátano sobrante. Envuélvelo bien en papel film y luego en papel de aluminio para evitar quemaduras por congelación. Se conservará en el congelador hasta por 3 meses. Descongélalo a temperatura ambiente antes de servirlo. Es una excelente opción para tener un postre a la mano.

Para un sabor más intenso a plátano, puedes tostar ligeramente las nueces (si las usas) en una sartén seca antes de añadirlas a la masa. Esto realzará su sabor y les dará una textura más crujiente. Tostar las nueces es un truco sencillo.

PREGUNTAS FRECUENTES

¿Puedo usar plátanos congelados para hacer este queque? Sí, puedes usar plátanos congelados. Descongélalos completamente a temperatura ambiente y escúrreles el exceso de líquido antes de aplastarlos y añadirlos a la receta. Los plátanos congelados son una excelente opción para esta receta.

¿Por qué se hundió mi queque en el centro? Hay varias razones por las que un queque puede hundirse en el centro. Puede deberse a que se abrió la puerta del horno con demasiada frecuencia durante la cocción, a que la temperatura del horno era incorrecta o a que se mezcló en exceso la masa. También puede ser que la cantidad de polvo de hornear o bicarbonato no sea la correcta o que estén caducados.

¿Cómo puedo saber si el queque está bien cocido? El queque estará listo cuando al insertar un palillo de madera en el centro, este salga limpio. La parte superior del queque debe estar dorada y ligeramente firme al tacto. Si el palillo sale con masa húmeda, hornea el queque durante unos minutos más y vuelve a comprobar.

¿Puedo hacer este queque sin azúcar? Sí, puedes sustituir el azúcar por un edulcorante natural como el puré de dátiles, el sirope de arce o la miel. Ten en cuenta que la textura y el sabor del queque pueden variar ligeramente. Ajusta la cantidad de edulcorante a tu gusto.

¿Puedo añadir otros ingredientes a la masa? ¡Claro que sí! Siéntete libre de experimentar con otros ingredientes como arándanos secos, trozos de piña, coco rallado o incluso trocitos de chocolate blanco. Añade aproximadamente media taza de estos ingredientes adicionales a la masa junto con las nueces o las chispas de chocolate (si los usas). La creatividad es bienvenida.

INSTRUCCIONES DE ALMACENAMIENTO

Guarda el queque de plátano sobrante en un recipiente hermético a temperatura ambiente. Se conservará fresco durante 2-3 días. Si vives en un clima cálido o húmedo, es mejor guardarlo en el refrigerador para evitar que se eche a perder.

En el refrigerador, el queque se conservará hasta por una semana. Asegúrate de que esté bien tapado para que no absorba olores de otros alimentos. Puedes calentarlo ligeramente en el microondas antes de servirlo, si lo prefieres tibio. El microondas le devuelve un poco de suavidad.

Como se mencionó anteriormente, también puedes congelar el queque de plátano. Envuélvelo bien en papel film y luego en papel de aluminio para evitar quemaduras por congelación. Etiquétalo con la fecha y consúmelo dentro de los 3 meses siguientes. Descongélalo a temperatura ambiente antes de servirlo.

Recetas relacionadas

Si te ha gustado este queque de plátano, seguramente disfrutarás de estas otras recetas de repostería con frutas. Explora estas opciones para ampliar tu repertorio de postres y sorprender a tus seres queridos con deliciosos sabores.

Prueba a hacer un pan de plátano y nueces, que es similar a este queque, pero con una mayor proporción de nueces y una textura más densa. Es perfecto para el desayuno o la merienda. Puedes añadirle canela y otras especias para darle un toque más aromático.

Otra opción deliciosa son los muffins de arándanos y plátano, que combinan la dulzura del plátano con la acidez de los arándanos. Son perfectos para un desayuno rápido o para llevar como snack. Puedes usar arándanos frescos o congelados.

También puedes animarte a preparar un crumble de manzana y plátano, que tiene una base de frutas cubierta con una capa crujiente de avena, mantequilla y azúcar. Es un postre reconfortante y delicioso, ideal para los días fríos. Sírvelo tibio con una bola de helado de vainilla.

CONCLUSIÓN

El queque de plátano es un clásico de la repostería casera que nunca pasa de moda. Su sabor reconfortante, su textura húmeda y su aroma irresistible lo convierten en una opción perfecta para cualquier ocasión. Esta receta es sencilla, fácil de seguir y produce un resultado consistentemente delicioso.

Con ingredientes básicos y unos pocos pasos simples, podrás disfrutar de un queque casero que superará con creces a las versiones compradas en la tienda. Anímate a experimentar con diferentes variaciones, añadiendo tus ingredientes favoritos o probando diferentes glaseados.

Disfruta del proceso de hornear y del delicioso aroma que llenará tu cocina mientras se hornea este maravilloso queque. Comparte con tus seres queridos y crea momentos dulces e inolvidables alrededor