Introducción
El Pipián Rojo es un platillo tradicional de la gastronomía mexicana, que destaca por su espesa y sabrosa salsa elaborada a base de semillas de calabaza, chiles y especias.
Es un platillo con raíces prehispánicas que ha perdurado a lo largo del tiempo, adaptándose a diferentes regiones e incorporando nuevos ingredientes.
Esta receta te guiará paso a paso en la preparación de un delicioso Pipián Rojo con Pollo, utilizando ingredientes auténticos y técnicas culinarias que realzan su sabor.
Prepárate para disfrutar de un platillo lleno de historia, tradición y un sabor inigualable que conquistará tu paladar.
Por qué te encantará esta receta
Este Pipián Rojo con Pollo es una receta que te permitirá conectar con la riqueza de la gastronomía mexicana.
Su sabor es profundo y complejo, con un toque picante que se equilibra con el dulzor de las semillas de calabaza.
Es un platillo reconfortante, ideal para compartir en familia o con amigos.
Además, es una receta relativamente sencilla de preparar, aunque requiere un poco de tiempo y paciencia para tostar los ingredientes y obtener la consistencia perfecta de la salsa.
El resultado final es un platillo vistoso, aromático y lleno de sabor que te transportará a la esencia de la cocina tradicional mexicana.
Te convertirás en un experto en la preparación de pipianes, una habilidad culinaria que impresionará a tus comensales.
Ingredientes que necesitarás
Para preparar este delicioso Pipián Rojo con Pollo, necesitarás los siguientes ingredientes:
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1 pollo entero cortado en piezas: Puedes usar un pollo entero cortado en piezas (muslos, piernas, pechugas, alas) o comprar las piezas por separado, según tu preferencia.
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1 taza de semillas de calabaza (pepitas): Las semillas de calabaza son el ingrediente principal del pipián. Aportan una textura espesa y un sabor característico a la salsa. Asegúrate de que estén peladas y sin cáscara.
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3 chiles anchos desvenados: Los chiles anchos aportan color, sabor y un toque ahumado al pipián. Son chiles secos, de color rojo oscuro y sabor suave.
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1/2 cebolla: La cebolla aporta sabor y dulzor a la salsa.
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3 dientes de ajo: El ajo añade un sabor intenso y aromático al pipián.
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1/4 de rajita de canela: La canela aporta un aroma cálido y un toque especiado a la salsa.
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4 clavos de olor: Los clavos de olor añaden un sabor intenso y aromático al pipián.
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4 pimientas gordas: Las pimientas gordas, también conocidas como pimienta de Jamaica o allspice, aportan un sabor complejo con notas de canela, clavo y nuez moscada.
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3 chiles morita o al gusto: Los chiles morita son chiles jalapeños maduros, secos y ahumados. Aportan un sabor ahumado y un picor moderado al pipián. Puedes ajustar la cantidad según tu tolerancia al picante.
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Cebolla picada finamente: La cebolla picada se utiliza para sofreír y dar sabor a la salsa.
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1 cucharada de consomé en polvo: El consomé en polvo, preferiblemente de pollo, realza el sabor del pipián.
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Sal al gusto: La sal se utiliza para sazonar el pollo y la salsa.
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Aceite vegetal: Se utiliza para freír la cebolla y sellar el pollo, si se desea.
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Agua o caldo de pollo: Se utiliza para cocer el pollo y para ajustar la consistencia de la salsa.
Cómo hacer Pipián Rojo con Pollo
El proceso de elaboración del Pipián Rojo con Pollo implica varios pasos: cocer el pollo, tostar los ingredientes para la salsa, licuar la salsa y, finalmente, integrar el pollo con la salsa.
A continuación, te explicamos el proceso paso a paso para que puedas preparar este delicioso platillo sin ninguna complicación.
Instrucciones paso a paso
Paso 1: Cocer el pollo.
Lava bien las piezas de pollo con agua fría.
En una olla grande, coloca las piezas de pollo, cúbrelas con suficiente agua o caldo de pollo, añade 1/4 de cebolla, 1 diente de ajo y sal al gusto.
Lleva el agua a ebullición a fuego alto, luego reduce el fuego a bajo, tapa la olla y cocina a fuego lento durante aproximadamente 45-60 minutos.
El pollo estará listo cuando esté tierno y se desprenda fácilmente del hueso.
Una vez cocido, retira el pollo del caldo y reserva. Cuela el caldo y resérvalo también, ya que lo utilizarás más adelante para la salsa.
Paso 2: Tostar los ingredientes para la salsa (especias).
En una sartén grande y seca, a fuego medio-bajo, tuesta las especias: la 1/4 de rajita de canela, los 4 clavos de olor y las 4 pimientas gordas.
Tuéstalas durante unos minutos, moviéndolas constantemente, hasta que suelten su aroma.
Ten cuidado de no quemarlas, ya que esto amargaría la salsa.
Retira las especias de la sartén y resérvalas.
Paso 3: Tostar los chiles.
En la misma sartén, tuesta los 3 chiles anchos y los 3 chiles morita (o la cantidad que desees) a fuego bajo.
Es importante tostarlos a fuego bajo para evitar que se quemen.
Voltea los chiles constantemente para que se tuesten de manera uniforme.
Estarán listos cuando cambien ligeramente de color y se vuelvan más flexibles, aproximadamente 1-2 minutos por cada lado.
Retira los chiles de la sartén y resérvalos.
Paso 4: Tostar las semillas de calabaza.
En la misma sartén, tuesta la taza de semillas de calabaza a fuego medio, moviéndolas constantemente.
Las semillas estarán listas cuando se inflen un poco y adquieran un color dorado, aproximadamente 5-7 minutos.
Ten cuidado de no quemarlas, ya que esto afectará el sabor de la salsa.
Retira las semillas de la sartén y resérvalas.
Paso 5: Asar la cebolla y el ajo.
En la misma sartén, asa la 1/2 cebolla y los 2 dientes de ajo restantes hasta que estén ligeramente dorados y suaves, aproximadamente 5-7 minutos.
No es necesario añadir aceite, ya que se asarán con el calor residual de la sartén.
Retira la cebolla y el ajo de la sartén y resérvalos.
Paso 6: Hidratar los ingredientes tostados.
Coloca todos los ingredientes tostados (especias, chiles, semillas de calabaza, cebolla y ajo) en un tazón grande.
Cubre los ingredientes con aproximadamente 2 tazas del caldo de pollo caliente que reservaste.
Deja reposar durante al menos 10 minutos para que los chiles se ablanden y los sabores se integren.
Paso 7: Licuar la salsa.
Transfiere los ingredientes hidratados, junto con el caldo de remojo, al vaso de una licuadora.
Licúa a velocidad alta hasta obtener una salsa tersa y homogénea.
Si la salsa está demasiado espesa, puedes añadir más caldo de pollo, poco a poco, hasta alcanzar la consistencia deseada.
Cuela la salsa si prefieres una textura más fina, aunque tradicionalmente se deja con la textura de las semillas.
Paso 8: Sellar el pollo (opcional).
Si deseas, puedes sellar las piezas de pollo en una sartén con un poco de aceite caliente antes de añadirlas al pipián.
Esto le dará al pollo un color dorado y una textura más firme.
Calienta 2 cucharadas de aceite en una sartén grande a fuego medio-alto.
Añade las piezas de pollo y cocínalas durante unos 3-4 minutos por cada lado, hasta que estén doradas.
Retira el pollo de la sartén y reserva.
Paso 9: Sofreír la cebolla picada.
En una cacerola grande u olla de fondo grueso, calienta 2 cucharadas de aceite a fuego medio.
Agrega la cebolla picada finamente y sofríela durante 5-7 minutos, hasta que esté transparente y ligeramente dorada.
Paso 10: Incorporar la salsa.
Vierte la salsa de pipián licuada en la cacerola con la cebolla sofrita.
Mezcla bien para integrar los sabores.
Paso 11: Sazonar y cocinar a fuego lento.
Añade la cucharada de consomé en polvo y sal al gusto a la salsa.
Si la salsa está muy espesa, agrega más caldo de pollo reservado, poco a poco, hasta obtener la consistencia deseada.
El pipián tradicionalmente es una salsa espesa, pero puedes ajustarla a tu gusto.
Lleva la salsa a ebullición a fuego medio, luego reduce el fuego a bajo, tapa la cacerola y cocina a fuego lento durante 15-20 minutos, removiendo ocasionalmente.
Esto permitirá que los sabores se integren y que la salsa espese ligeramente.
Paso 12: Integrar el pollo.
Añade las piezas de pollo cocido (y sellado, si lo hiciste) a la salsa de pipián.
Mezcla suavemente para que el pollo se impregne bien con la salsa.
Continúa cocinando a fuego lento durante 10-15 minutos más, para que el pollo se caliente y absorba los sabores del pipián.
Paso 13: Servir y disfrutar.
Sirve el Pipián Rojo con Pollo caliente, acompañado de arroz blanco y tortillas calientes.
Puedes decorar el plato con un poco de cilantro fresco picado, si lo deseas.
¡Tu delicioso Pipián Rojo con Pollo está listo para ser disfrutado!
Consejos útiles
Si no tienes consomé en polvo, puedes usar una taza extra de caldo de pollo.
Ajusta la cantidad de chiles morita según tu tolerancia al picante.
Puedes tostar las semillas de calabaza en un comal o en el horno a baja temperatura.
Si no tienes una licuadora potente, es posible que necesites licuar la salsa en tandas y/o colarla para obtener una textura más suave.
Puedes añadir otras verduras al pipián, como calabacitas, chayotes o ejotes, durante los últimos 20 minutos de cocción.
Para un sabor más intenso, puedes añadir una hoja de laurel o una ramita de epazote a la salsa mientras se cocina a fuego lento.
Si quieres un pipián más espeso, puedes disolver una cucharada de masa de maíz en un poco de caldo de pollo frío y añadirla a la salsa durante los últimos minutos de cocción.
Si te sobra pipián, puedes usarlo como salsa para enchiladas, chilaquiles o incluso para rellenar empanadas.
Detalles
- Tiempo de preparación: 30 minutos
- Tiempo de cocción: 60-75 minutos (pollo) + 30-40 minutos (salsa)
- Tiempo total: 90-115 minutos
- Rendimiento: 6-8 porciones
- Categoría: Plato principal
- Método: Cocción en olla, estufa
- Cocina: Mexicana
- Dieta: (Se puede adaptar para dietas especiales)
Notas
La clave para un buen pipián está en el tostado de los ingredientes, ya que esto intensifica su sabor.
No tengas miedo de ajustar la cantidad de especias y chiles a tu gusto.
El tiempo de cocción del pollo puede variar dependiendo del tamaño de las piezas.
La consistencia de la salsa es una cuestión de preferencia personal. Puedes hacerla más espesa o más ligera añadiendo menos o más caldo de pollo.
El pipián es un platillo que se disfruta aún más al día siguiente, ya que los sabores se intensifican.
Preguntas frecuentes
¿Puedo usar otro tipo de chile?
Sí, puedes usar otros chiles secos, como chiles guajillos o pasilla, en lugar de los chiles anchos. Sin embargo, ten en cuenta que el sabor y el color del pipián pueden variar.
¿Puedo usar semillas de calabaza tostadas y saladas?
No se recomienda usar semillas de calabaza tostadas y saladas, ya que esto afectará el sabor del pipián. Es mejor usar semillas de calabaza crudas y sin sal.
¿Puedo hacer el pipián sin pollo?
Sí, puedes hacer una versión vegetariana del pipián omitiendo el pollo y añadiendo más verduras, como calabacitas, chayotes, ejotes o champiñones. También puedes usar tofu o setas como sustituto del pollo.
¿Qué hago si no tengo caldo de pollo?
Puedes usar agua para cocer el pollo y para la salsa, pero el sabor del pipián será menos intenso. También puedes usar caldo de verduras o agua con cubitos de consomé de pollo.
¿Cómo puedo espesar la salsa si está muy líquida?
Si la salsa está muy líquida, puedes disolver una cucharada de masa de maíz en un poco de caldo de pollo frío y añadirla a la salsa, cocinando a fuego lento hasta que espese. También puedes licuar una parte de la salsa con un poco de pan tostado o tortilla dorada.
¿Cuánto tiempo dura el pipián?
El pipián se conserva bien en el refrigerador durante 3-4 días, guardado en un recipiente hermético. También puedes congelarlo por hasta 3 meses.
¿Puedo congelar el pipián?
Sí, puedes congelar el pipián. Deja que se enfríe completamente antes de transferirlo a un recipiente apto para congelador o a una bolsa con cierre hermético. Se conservará bien durante 2-3 meses. Para descongelarlo, déjalo en el refrigerador durante la noche y luego caliéntalo a fuego lento en una olla.
¿Con qué se puede acompañar el pipián?
El pipián se sirve tradicionalmente con arroz blanco y tortillas calientes. También puedes acompañarlo con frijoles refritos, ensalada fresca o verduras al vapor.
¿Puedo usar pechuga de pollo deshuesada y sin piel?
Sí, pero el tiempo de cocción será menor. Cocina la pechuga hasta que esté bien cocida, aproximadamente 20-30 minutos.
¿Por qué es importante tostar los ingredientes?
Tostar los ingredientes secos, como las especias, los chiles y las semillas de calabaza, ayuda a liberar sus aceites esenciales y a intensificar su sabor. Esto le da al pipián un sabor más profundo y complejo.
Instrucciones de almacenamiento
Guarda el pipián sobrante en un recipiente hermético en el refrigerador.
Se conservará bien durante 3-4 días.
También puedes congelarlo en un recipiente apto para congelador o en una bolsa con cierre hermético por hasta 3 meses.
Para recalentarlo, descongélalo en el refrigerador durante la noche (si estaba congelado) y luego caliéntalo a fuego lento en una olla, removiendo ocasionalmente.
Recetas relacionadas
Si te ha gustado esta receta de Pipián Rojo con Pollo, seguro que disfrutarás de estas otras deliciosas recetas mexicanas:
- Mole Poblano: Otro platillo tradicional mexicano con una salsa espesa y compleja a base de chiles, especias, chocolate y otros ingredientes.
- Pipián Verde: Una variación del pipián hecho con chiles verdes, tomatillos y cilantro.
- Enchiladas Rojas: Tortillas rellenas de pollo o queso, bañadas en una salsa roja a base de chiles y cubiertas con queso, crema y cebolla.
- Chilaquiles Rojos: Totopos (trozos de tortilla fritos) bañados en salsa roja, cubiertos con queso, crema, cebolla y, opcionalmente, pollo o huevo.
- Pozole Rojo: Un caldo sustancioso a base de maíz pozolero, carne de cerdo o pollo y chiles, que se sirve con una variedad de guarniciones.
Conclusión
El Pipián Rojo con Pollo es un platillo emblemático de la gastronomía mexicana, que combina sabores intensos, texturas variadas y una rica historia culinaria.
Esta receta te ha guiado paso a paso en la elaboración de un Pipián Rojo auténtico, desde la selección de los ingredientes hasta el momento de servirlo.
Ahora tienes el conocimiento y las habilidades para preparar este delicioso platillo en casa y sorprender a tus seres queridos con un manjar lleno de tradición y sabor.
Anímate a preparar este Pipián Rojo con Pollo y disfruta de una experiencia culinaria inolvidable que te conectará con la riqueza de la cocina mexicana. ¡Buen provecho!
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